El sistema de gestión de calidad conocido como HACCP (por sus siglas en inglés) es un sistema de análisis de peligros y puntos críticos de control. Se utiliza en la industria alimentaria para garantizar la seguridad de los alimentos que se producen y comercializan.
¿Para qué se utiliza el sistema HACCP?
El objetivo es prevenir la aparición de peligros físicos, químicos o biológicos que puedan afectar la calidad e inocuidad de los productos alimentarios.
¿El sistema HACCP es obligatorio en Chile?
Sí, en Chile el sistema HACCP es obligatorio para las empresas que se dedican a la producción y comercialización de alimentos. Esto se establece en el Reglamento Sanitario de los Alimentos (RSA) y su objetivo es garantizar la seguridad alimentaria y proteger la salud de los consumidores.
¿Qué tipo de empresas deben usar el sistema HACCP en Chile?
El RSA establece que todas las empresas que se dedican a la producción, elaboración, procesamiento, envasado, almacenamiento, transporte, distribución y comercialización de alimentos deben implementar un sistema de aseguramiento de calidad basado en los principios del sistema HACCP.
¿Quién regula y fiscaliza la correcta implementación del sistema HACCP?
El Ministerio de Salud de Chile, a través del Instituto de Salud Pública (ISP), es el encargado de regular y fiscalizar el cumplimiento de las normas sanitarias en la industria alimentaria. Las empresas que no cumplan con los requisitos establecidos en el RSA pueden ser sancionadas e incluso clausuradas.
Por lo tanto, es muy importante que las empresas de la industria alimentaria en Chile implementen y cumplan con los requisitos del sistema HACCP para garantizar la seguridad de sus productos y cumplir con las normas y regulaciones sanitarias vigentes.
¿Cuáles son los principios del sistema HACCP que aplicamos en Montelimar?
El sistema HACCP se basa en siete principios que deben ser aplicados por todas las empresas de la industria alimentaria:
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Identificación de peligros: consiste en identificar los posibles peligros a los que están expuestos los alimentos en cada una de las etapas de la producción, desde la materia prima hasta el producto final.
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Determinación de puntos críticos de control: se refiere a identificar los puntos de control en el proceso de producción donde se pueden aplicar medidas preventivas para evitar la aparición de peligros.
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Establecimiento de límites críticos: una vez identificados los puntos críticos de control, se establecen los límites máximos o mínimos aceptables para cada parámetro de control.
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Monitoreo: se realiza un seguimiento periódico de los puntos críticos de control para asegurarse de que los límites críticos se están cumpliendo.
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Acciones correctivas: si se detecta una desviación en los límites críticos, se deben tomar medidas inmediatas para corregir la situación y evitar que el problema se propague.
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Verificación: es la revisión periódica del sistema para asegurarse de que se está cumpliendo con los requisitos establecidos en el sistema HACCP.
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Documentación y registro: es fundamental mantener un registro completo y detallado de todo el proceso de producción para poder hacer un seguimiento y verificación del sistema.
¿Qué se requiere para implementar el sistema HACCP para el procesamiento de frutas y verduras en Montelimar?
La implementación del sistema HACCP en una empresa de la industria alimentaria requiere de un equipo especializado en el tema, ya que es una metodología compleja que se debe aplicar de manera rigurosa y sistemática. La capacitación del personal en los principios del sistema HACCP es fundamental para garantizar su correcta implementación.
En resumen, el sistema de calidad HACCP es una herramienta esencial en la industria alimentaria para garantizar la seguridad e inocuidad de los productos alimenticios. Su correcta implementación y aplicación permite a las empresas cumplir con los requisitos legales y mejorar la confianza de los consumidores en sus productos.